El pasado 5 de diciembre compartí el siguiente tuit:
Un paciente se enfada muchísimo porque ante una determinada situación de otro paciente hemos encontrado una solución no coercitiva. Nos recriminaba que hace años por lo mismo a él lo contuvimos y que no era justo.
— José Manuel García (@cuidadosSM) December 5, 2019
Seguimos avanzando #HaciaLaContenciónCero@bpsohusll
En menos de un mes, se ha repetido la misma historia, de nuevo otro paciente me vuelve a pedir lo mismo: que apliquemos contenciones mecánicas a una paciente con una determinada conducta porque hace unos años, a él, le habíamos contenido por el mismo motivo y que no era justo.
Como dije en Twitter, este tipo de incidencias nos animan y nos indican que, poco a poco, estamos cambiando cosas en la dirección correcta #HaciaLaContenciónCero. Sin embargo, aunque valoro muy positivamente lo sucedido tengo claro que no es el objetivo principal. Está muy bien, que seamos capaces de responder a determinadas situaciones con alternativas a la contención mecánica pero mucho más importante es evitar que las personas lleguen al estado en el que tengamos que plantearnos si utilizar, o no, las sujeciones. Y para ello la adecuación del entorno, la prevención y la detección temprana de las situaciones de riesgo de agitación/violencia para poder aplicar cuidados preventivos es fundamental para conseguir el objetivo final de #0contenciones.
Otra interesante cuestión a tener en cuenta, y que dará para otra entrada, son las relaciones que se establecen entre pacientes y su modo, a veces tan peculiar, de interpretar el principio de justicia.
En ambos casos, tras explicar el motivo en el cambio de criterio y el proyecto BPSO que estamos implantando, los pacientes quedaron conformes y agradecidos.
¡Seguimos avanzando!
El cuidado en la palabra 