Hoy, de alguna manera, acabamos la primera etapa de un largo viaje de tres años. Una aventura compartida con unos viajeros maravillosos que han hecho soportable la dura travesía llena de dificultades a cada paso.

Tras estos tres años, tanto la tripulación como los pasajeros, hemos llegado a una tierra llena de posibilidades. Hemos aprendido unos de otros a relacionarnos de una manera más profesional, más humana, más segura y enriquecedora.

A lo largo del camino hemos vencido miedos, prejuicios y costumbres de una manera prudente pero, a la vez, valiente y decidida para llegar a buen puerto, siempre, al amparo de la ciencia y la evidencia científica.

Y casi sin tiempo de descansar, de recobrar las fuerzas y de contar a los cuatro vientos nuestra historia debemos zarpar de nuevo hacia la segunda etapa, esta vez, acompañados de nuevas naves para trasladar a nuestros pasajeros a un mundo aún mejor.

Gracias, salud y que los vientos favorables nos acompañen…

Dicen que hay toros azules
en la primavera del mar.
El sol es el caporal
y las mantillas las nubes,
que las mueve el temporal.
Dicen que hay toros azules
en la primavera del mar.
…
Háblame del mar, marinero,
háblame del mar, háblame.

Háblame del mar, marinero. Rafael Alberti

Dedicado con todo mi cariño y agradecimento a todos mis compañeros y a todas mis compañeras de viaje y, especialmente, a mis capitanas: Vero y Carmen.
Y a mi Isa, sin ella nada sería posible...